“Me acuerdo de chico escuchar radio atentamente, de tener mi radio y dormir con una pequeña radio, de grabar cassettes y anunciar los temas. Yo era muy fantasioso, todavía a veces creo que lo sigo siendo, no? Y la radio me cuadraba mucho dentro de la fantasía. Con un micrófono y un poquito de parla... El resto ves como la piloteás”.
“Era medio un nerd, tenía mucho que ver con el mundo que me había armado yo. Estaba en un micro clima armado por mí todo el tiempo, pero a mí no me desagradaba, de hecho el día de hoy creo que lo mantengo y no me desagrada”.
“Yo me acuerdo el primer día que hablé por radio, yo me di cuenta.. viste cuando te das cuenta y decís.. yo esto lo domino, yo puedo hacer esto toda mi vida y ahí me di cuenta de tener una pasión, como el día de hoy. Me di cuenta que lo iba a hacer, ni siquiera había arreglado un sueldo, no había una ambición ni de fama ni de trascender, lo hice por pasión. Al poder hablar escucharme por los auriculares y ver que tanto parloteo tenía yo dije: Acá está permitido! Me di cuenta que tenía un yeite. Tenía un yeite..A mí eso me encantó”.
“Yo amé la radio. A veces veo que lo digo en pasado, pero.. yo me di cuenta que estaba en el planeta que quería, y no lo hice ni por fama, ni sabía lo que iba a hacer, pero pensaba que me iba a ir bien, yo digo: yo acá puedo hacer desastre, pero desastre con entusiasmo, no? Tengo un montón de cosas para hacer acá que no se están haciendo”.
“A lo mejor hubiese sido feo si hubiese existido en los medios gente sin pasión”.
Mario Pergolini